¿Cómo medir el precio de un bolso con el que te puedas sentir bien, del que nada más verlo te enamores y quieras que forme parte de tu armario?
Fuera de las grandes firmas de lujo como Hermès, Chanel o Louis Vuitton, por poner algunos ejemplos, y cuyos precios no están al alcance de cualquiera, no hay nada más que ver este Hermès:
«(Como si de la más prestigiosa obra de arte se tratara, el modelo Birkin de Hermés fue subastado por la casa de subastas Christie´s en Hong Kong, batiendo su propio récord mundial y convirtiendo a este accesorio en el bolso más caro del mundo, valorado en casi 380.000 $)»
Pues como digo, fuera de estas marcas, para medir el precio de un «buen» bolso, hay que valorar muchas cosas, pero sobre todo, nos deberíamos fijar en unos puntos básicos:
El material: unos materiales de calidad son imprescindibles para la elaboración de estos bolsos que se realizarán a mano por marroquineros cualificados, desde la piel de vacuno, el ante, o las pieles exóticas, hasta las últimas tendencias en eco-piel vegana, hecha de fibras naturales o sintéticas, como son el algodón, el cáñamo, el lino, la microfibra, el ramio y el cuero artificial.
El interior: los materiales interiores deben ser acordes al material exterior, pero además debemos fijarnos en esos bolsillos (donde ordenas de manera adecuada todo lo que necesitas a lo largo del día, o lo poco necesario para tus noches), sus cremalleras, sus acabados, sus cierres.
Las costuras: las costuras hacen que el bolso tenga un montaje ideal, al igual que la costura es indispensable para realizar el montaje perfecto de las partes de un traje de alta costura , en un bolso es indispensable que las costuras sean impecables, rectas y bien rematadas.
La pintura, los herrajes, el diseño y sobre todo el acabado: es decir que todas las partes del bolso estén cuidadas hasta el más mínimo detalle. el acabado de la pintura, el remate de las asas, los herrajes apropiados a cada modelo, su elaboración hecha a mano, las terminaciones cuidadas con mimo y profesionalidad. Todos esos detalles que hacen que cuando te lo cuelgues del hombro o lo cojas en tus manos, sientas que es el complemento ideal, que no te puedes quedar sin él.
Por lo tanto ese adjetivo que acompaña a bolso y que aparece entrecomillado » buen», lleva consigo todos estos puntos básicos que se deberían tener en cuenta a la hora de pagar ese bolso. Saber que ha sido realizado a mano por un artesano español, con materiales de primera calidad, con unos acabados impecables y con la garantía de saber hacer. Se deben tener en cuenta todas estas variables para saber que tenemos en nuestras manos un complemento con la capacidad de emocionarnos.